Una forma perfecta de saber qué se hace con el ordenador cuando son otros usuarios quienes lo están utilizando es recurrir a un keylogger como BackTrack.
El cometido de la aplicación no es otro que el de apuntar todo lo que se teclea en el ordenador con pelos y señales.
BackTrack emplea una base de datos MySQL para almacenar la información. En cada registro se guardan datos como la hora en la que se introdujo el texto, el nombre de la aplicación que estaba siendo utilizada en ese momento y finalmente el texto.
Pero también puede emplearse como una herramienta de seguridad ante caídas inesperadas del sistema. Imagina que has perdido un documento mientras trabajabas y no te dio tiempo a guardarlo. El registro de BackTrack seguro que lo almacenó a tiempo.
BackTrack no funciona ni con las contraseñas, ni con las aplicaciones del entorno Classic. El texto que guarda no está formateado. Sólo almacena texto plano.
Comentarios
Todavía no hay opiniones sobre BackTrack. ¡Sé el primero! Comentar